La aparición de mayor numero de mega mercados en nuestra ciudad en inminente, como resultado del boom de inversiones nacionales y extranjeras en ese y en otros sectores. Lo que, indudablemente, esta haciendo perder competitividad a los mercados tradicionales, en especial a nuestro concurrido mercado Modelo (que de ello no tiene nada) .
Muchos expertos en el tema opinan que ya cumplió su ciclo de vida, que su infraestructura no solo es obsoleta sino que constituye un riesgo para la seguridad e integridad de los ciudadanos que acuden al mismo. Similar problemática presentan decenas de mercados populares en nuestro suelo patrio.
Pero, de lo que quiero ocuparme ahora, no menos importante desde luego, es sobre lo que podría determinar, también, la subsistencia o desaparición, no solo de este centro de abastos sino de muchos otros similares. Intentaré responder a la pregunta sobre qué ocurrió para tal estancamiento y desventaja comparativa . El problema de éstos radica en la mala gestión o administración que han sufrido durante décadas sin prever los cambios que se veían venir - un entorno global en donde la economía de mercado esta determinada por los consumidores quienes eligen finalmente que productos y servicios comprar, cuanto pagar por ellos, pero sobre todo ,la determinante situación de DECIDIR DONDE COMPRAR – la aparición de cambios en el estilo de vida y hábitos de consumo orientados a la innovación y a elevar el nivel de vida de las personas , también los afecta . Situación problemática que ahora los cortos de vista e involucrados en el tema de los mercados municipales, solo ven fundamentalmente en tres áreas:
La primera , limpieza y salubridad; la segunda, infraestructura deficiente; y la tercera, seguridad y vigilancia. Necesarias y prioritarias, desde luego, comunes en casi todos los mercados de abastos, pero hay mucho más… si miramos al horizonte en prospectiva.
Debilidades y amenazas que se podrían revertir mediante algunas posibilidades que ensayamos a continuación : Se podría pensar en empresas mixtas –municipal y privada ; también podemos ensayar una propuesta que busque tercerizar o concesionar algunas áreas de gestión del mercado (como las de administración y de limpieza ) y por último, definitivamente proponer la privatización de estos mercados, algo de lo que ya se están encargando municipalidades provinciales y distritales de regiones como Trujillo, Puno , Tacna y Ayacucho , entre otras . Cuyas autoridades se han dado cuenta de la necesidad de una visión gerencial en el manejo de los mercados de abastos , transfiriendo directamente la propiedad de los puestos a sus actuales y legítimos conductores – no a directivas de asociaciones o a gremios de conductores - considerando a todo a quien (incluyendo a informales de alrededores ) se desee incluir en los respectivos proyectos de Ingeniería e inversión ,que estarían a cargo de profesionales quienes se ocuparían de implementar las respectivas innovaciones técnicas y de infraestructura , operativas y estratégico-comerciales .
Recordemos que en el Perú la privatización de mercados esta regulada por la vigente ley Nº 26569 y su reglamento (DS Nº 004-96-press) y sus modificatorias y la 27001 .
A estos procesos previos se le debe añadir indudablemente una brillante oportunidad , el factor conocimiento, su implementación sería el siguiente paso, como valor agregado, mediante talleres de capacitación en servicio y atención al cliente, gestión gerencial, marketing, marchandising y packaging , logística, formalización y contacto con nuevos proveedores, procesos que deberán ser monitoreados por sus propios conductores. Desconocer esto o solo quedarse en la primera parte señalada al inicio, sería fatal para miles de familias que laboran en estos centros de abastos, que por el egoísmo y la incapacidad de dirigentes trasnochados y oxidados en propuestas, dejaran morir aspiraciones de quienes tienen en estas actividades un sustento económico y un proyecto de vida, ya que, en términos de economía y mercadeo actual , lo que no se actualiza o se innova , no sirve y se expectora y se olvida.
Las municipalidades, también podrían constituirse en oportunidades para estos mercados tradicionales. Previo análisis situacional, con inmenso criterio técnico y legal, deberían asumir su liderazgo con carácter y firmeza para orientar a los afectados directos de esta problemática ( en este caso los comerciantes ) sobre el nuevo contexto en la evolución de los servicios comerciales en la realidad actual, y sobre los nuevos mecanismos estratégicos para interpretar la problemática social y empresarial de estos comerciantes. De esa manera no permitir que sus respectivos negocios vegeten o perezcan. Explicarles la necesidad de ponerse a tono con las exigencias competitivas y lograr una estrategia de largo plazo para enfrentar el poder y la presión de cadenas de mercados modernísimos, que les afectaran sin compasión. Esto es indudable, ya que en un mercado global todos compiten por igual, sean grandes o chicos. Es una gran torta que hay que saber repartírsela con inteligencia y estrategia.
Por otro lado, sería ideal y oportuno dejar de lado las opiniones y manejos tendenciosos de politiqueros que desde todo ángulo, quieren imponer sus intereses muy personales, sin buscar priorizar soluciones concretas, viables y coherentes con el ritmo actual de los negocios .Toda solución debería pasar por buscar, inicialmente, la sobrevivencia comercial de estos micro negocios y sus respectivos gestores, y posteriormente, el éxito competitivo y diferenciado de sus emprendimientos. Labor que el Estado con rostro de municipio, por medio de sus gerencias competentes, debería empezar a trabajar ahora mas que nunca en ciudades, que como la nuestra , es una de las mas comerciales del país. Pero para ello se hace necesaria la participación de capital humano preparado y capacitado para tales efectos.
Finalmente , solo con la voluntad de los propios comerciantes y la participación proactiva de las autoridades municipales ,se evitara ver en corto tiempo mercados municipales vacíos, sin consumidores, con menor rotación de productos y menores ingresos para sus conductores.
Los mercados de abastos poseen la fortaleza exclusiva de tener un trato personalizado e individualizado con el cliente, que se debería capitalizar y potencializar dentro de las mejores condiciones por crear , y de esa manera, detectar y aprovechar herramientas como la fidelización de clientes, que permite hacer cartera y asegurar cuotas altas de ventas. Lo que se consigue con el privilegio que solo poseen los negocios face to face (cara a cara) , de tener un caserito fiel ; concepto propio de los mercados populares y que es la base del principio de la fidelización de clientes.
Los especialistas asumen a la herramienta FIDELIZAR, como el primer paso para el éxito comercial, el contacto coloquial , casi familiar con el caserito, la venta al menudeo , la yapa ; el guárdeme para mañana, o el consígame tal o cual producto ;las porciones de unidad (1/8, ¼ o al ojo y tanteo) es algo que ya quisieran tener lo supermercados, quienes a través del tiempo se han inspirado en éstos y otros modelos y experiencias inherentes a los mercados tradicionales, y que copian para desarrollar sus propias estrategias de mercadeo. Los mercados populares siempre han sido fuente de inspiración para supermercados y mega markets .¿Entonces por que los mercados tradicionales se estancaron? La respuesta ya es obvia. Que de no tomar urgentes medidas, a los comerciantes de los mercados de abastos sólo quedará lamentarse frente a un enorme y ostentoso letrero luminoso de un nuevo mega plaza multinacional. Algo que desde luego, no deseamos y que sí se podría evitar, actuando a tiempo y sobreponiéndose a la ignorancia y desconocimiento.